De acuerdo al Instituto Mexicano del Seguro Social, en nuestro país se estima que 7.3 por ciento de la población de personas adultas mayores tiene Alzheimer, así como que el nueve por ciento presenta demencia precoz. Es un trastorno que se caracteriza por cambios en el cerebro que derivan en depósitos de ciertas proteínas, mismos que afectan y provocan la muerte de las neuronas. Uno de los mayores factores de riesgo es la edad, sin embargo, también se vincula a condiciones hereditarias y genéticas, pero esto no es todo, hay otras situaciones que entran en juego.
“Existen diversas causas vinculadas al deterioro cognitivo o demencia, como aquellas que tienen un origen vascular relacionado con infartos cerebrales, deficiencia de vitamina B12, alteraciones por enfermedades tiroideas, problemas de depresión crónica. Frente a esto, cambiar a un mejor estilo de vida contribuirá a disminuir el avance”- asegura el Dr. José Alfonso Meza Medina, Neurólogo clínico y Neuro-oncólogo del Centro Neuromeza en Monterrey, Nueva León y vocero de Sun Pharma México.
“Hay aspectos que se pueden modificar para combatir el riesgo de tener esta condición, y si se tiene arriba de 65 años, es primordial ponerlos en acción a la brevedad” – comenta el Dr. José Alfonso Meza Medina. – “En este sentido, la iniciativa mundial World Wide FINGERS, que busca prevenir el deterioro cognitivo y la demencia, sostiene que son 5 pilares para una vida más sana, los que contribuirán para retrasar la presencia del daño neurocognitivo”:
1.-Buena alimentación: Disminuir cantidad de ácidos grasos procesados, y aumentar la cantidad de verduras con mínimo de 30 porciones por semana.
2.-Mayor actividad física: Caminatas, trote, ejercicios de estiramiento, cardio, natación…lo que su capacidad, preferencia y economía permita.
3.-Impulsar la recreación y sociabilización: Los amigos son una gran motivación, pero también es importante relacionarse con nuevos círculos y aprender habilidades. La lectura, escultura, pintura, cine y teatro son una valiosa alternativa para lograr la estimulación cognitiva de manera cotidiana.
4.-Cuidar la salud cardiovascular: El corazón es un órgano que se relaciona estrechamente con nuestra salud mental, por lo cual se requiere conservar un nivel adecuado los niveles de presión arterial, glucosa y triglicéridos. De igual forma, es importante realizarse un check up cada 3 años a partir de los 35 años, y a partir de los 45 años hacerlo una vez al año, con el fin de medir la cantidad de bombeo de sangre al cerebro.
5.- Bienestar general: Mantener un buen estado físico es fundamental. Cualquier alteración visual, gástrica, muscular, dermatológica, etc. debe ser atendida con oportunidad.
El 21 de septiembre ha sido designado por la Organización Mundial de la Salud como el Día Mundial del Alzheimer, un padecimiento al que se debe combatir con información y acceso a los tratamientos, así como reconociendo y apoyando la labor del cuidador y la familia, quienes se enfrentan a un complejo proceso de adaptación que afecta a múltiples esferas de la vida: física, laboral, social, emocional y económica.
Toda medida de prevención tendrá un impacto positivo y preverá complicaciones y gastos derivados del cuidado de una persona con Alzheimer. “Investigaciones realizadas en Estados Unidos, indican que el costo de atender a un paciente con demencia oscila entre 4000 hasta 5000 dólares, pero si avanza hasta un grado más severo puede alcanzar los 38,000 USD al año de tratamiento, cuidados o pérdidas laborales” finaliza el Dr. Meza Medina.