¿Qué pretende Andrés Manuel López Obrador con crear un escenario
de golpe de estado? ¿Acaso quiere agradar a Donald Trump que habla
de que habrá un baño de sangre si pierde las elecciones en los Estados
Unidos?
Si es así, el presidente está entrando en un terreno muy peligroso para
México, que no se olvide que sí Joe Biden pierde las elecciones en
noviembre, dejará la Casa Blanca hasta enero del 2025 y una ballena
herida todavía da coletazos muy fuertes que pueden impactar
directamente en palacio nacional.
López Obrador se escuda en que la oposición, en alianza con el poder
judicial, está preparando un “golpe de estado técnico” para las
elecciones del 2 de junio, nada más falso, aunque no sería sorpresa que
él sea quien lo esté operando.
El tabasqueño sabe que si llega su amigo, así lo considera, aunque
Trump no es amigo ni de su familia, tendrá la oportunidad de maniobrar
para tratar de mantener el poder con la ayuda del de los pelos de elote.
Sabe que un escenario de violencia le favorece a sus aspiraciones de
perpetuarse en el poder, porque será el autor y quien, a su vez, lo
resuelva, lo que haría que Claudia Sheinbaum, en caso de ganar la
elección, se doblegue a sus mandatos del dueño del bastón de mando.
Hace más de un año un viejo militante priista me habló de esa
posibilidad, no le creí, pero hoy el presidente está en esa ruta, sabe lo
que trae en sus manos y sabe distraer la atención cuando dice una cosa
y hace todo lo contrario, como en este caso.
Biden puede ser el factor para que este objetivo del inquilino de Palacio
Nacional se frustre, depende mucho del resultado en la elección
presidencial en la unión americana.
Sea como sea, López Obrador no cesará en quedarse, porque como
dije anteriormente hace todo lo contrario de lo que dice y en más de una
ocasión ha dicho que se va a la “Chingada” su rancho en Palenque, que
por cierto, “no lo tiene ni Obama”. ¿Usted le cree al “Peje”? Yo tampoco.
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Que Clara Brugada le baje dos rayitas a su cuaderno, las encuestas
serias no le dan los dos dígitos de ventaja, por el contrario su principal
adversario, Santiago Taboada, va hacia arriba, sólo está a 6 y 7 puntos
de la candidata oficial, con quien el impresentable Martí Batres quiere
hace lo mismo con la ex alcaldesa de Iztapalapa, como Andrés Manuel
con Sheinbaum, manejarla. Por cierto Brugada presume de demócrata
pero olvida que se prestó para que López le quitará la entonces
delegación a “Juanito”, en un acto democrático sólo para los morenos y
sus cochinadas. ¿Se acuerdan? Taboada ganó el debate del domingo y
las próximas encuestas serias, seguramente lo podrán más cerca o
logrará rebasar a Clarita. Hay muchas posibilidades de que la Ciudad de
México se pinte de azul en el próximo sexenio…Cuentas alegres de
Octavio Romero Oropeza ayer durante la celebración del 86 aniversario
de la Expropiación Petrolera. La producción va a la baja, las finanzas
públicas de Pemex sólo se sostienen con aportaciones extras de
Hacienda y es falso que la deuda de la empresa del Estado disminuyó.
A otro perro con ese hueso, Romero.
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