Mientras el turismo global avanza hacia experiencias más automatizadas y personalizadas, un nuevo tipo de inteligencia comienza a jugar un papel decisivo: la inteligencia artificial conversacional. A diferencia de los sistemas tradicionales enfocados en predicción o logística, esta tecnología se activa en el punto más sensible del viaje: la atención al cliente en tiempo real.
Durante temporadas de alta demanda —Semana Santa, verano o fin de año—, la fricción en los canales de atención se convierte en un factor crítico que puede definir la satisfacción o frustración de un viajero. De acuerdo con el estudio Digital Trust Survey México 2024 de PwC, el 68% de las empresas del sector turismo ya utilizan IA, particularmente en funciones asociadas a la gestión de reservas y atención al cliente. Esta tendencia se cruza con otro dato: el 90% de los consumidores mexicanos usan WhatsApp semanal o diariamente para interactuar con empresas, según el estudio de Meta y Nodus de 2025.
La intersección de ambos hallazgos plantea una respuesta clara: la atención al viajero ya no se resuelve solo con más agentes humanos, sino con arquitecturas conversacionales diseñadas para escalar, aprender y responder de manera contextual. Estas soluciones, basadas en IA conversacional, permiten absorber miles de interacciones simultáneas sin comprometer tiempos de respuesta, reduciendo la dependencia operativa en momentos críticos.
“Cuando una persona llega a un aeropuerto y necesita cambiar su vuelo, pedir asistencia o resolver un problema, no busca un banner ni un call center. Espera que la marca esté disponible, entienda su caso y actúe en segundos. Eso solo es posible si el canal de atención está impulsado por una inteligencia capaz de conversar, no solo de contestar”, explica Thiago Gonçalves, Director para Latinoamérica y Country Manager para México de Blip..
La implementación de IA conversacional no solo transforma la experiencia del usuario, también reconfigura la forma en que las empresas turísticas gestionan su operación. Según el estudio Business Messaging Evolution 2024 de BCG y Meta, las organizaciones que han adoptado esta tecnología reportan mejoras del 19% en satisfacción del cliente y hasta 30% en eficiencia operativa.
En un ecosistema donde el viajero necesita soluciones ágiles y personalizadas, facilitar el acceso a un servicio automatizado, eficiente y contextual deja de ser una innovación para convertirse en el nuevo estándar.
La transformación del turismo no llegará solo por el rediseño de destinos o la eficiencia logística, sino por la forma en que las empresas son capaces de sostener conversaciones útiles, humanas y continuas con quienes viajan. La inteligencia artificial conversacional no reemplaza el trato personalizado; lo habilita, lo escala y lo vuelve operativo cuando se cancela un vuelo de último minuto, cuando se necesita adelantar el check-in desde el aeropuerto, cuando surgen imprevistos con una reservación o cuando se requiere asistencia posterior a una estancia. Es en esos momentos donde una conversación automatizada, bien diseñada, puede marcar la diferencia entre una experiencia frustrante y una que fluye.