Desarticulados, sin un liderazgo ni proyecto claros a seguir, la oposición y la mayoría abrumadora de los 100 millones de mexicanos de la Lista y Padrón Electoral coincidieron sin embargo en rechazar ayer participar en la elección del Poder judicial.
Pocos, muy pocos, fueron los que se manifestaron abiertamente en contra en las concentraciones del Ángel de la Independencia y en el Monumento a la Revolución.
Pero la contundente ausencia de votantes en las pocas casillas que se instalaron en el país dejó en claro la falta de motivación y rechazo a este proceso ideado e iniciado por Andrés Manuel López Obrador y concluido contra viento y marea, en medio del repudio y advertencias de importantes sectores nacionales e internacionales, por Claudia Sheinbaum.
Ayer concluyó así, sin lograr la mínima legitimidad social, la quizá más sucia y tramposa, ilegal y antiética reforma constitucional para anular, desaparecer, el tercer y último poder de los 3 con que contaba la República Mexicana para concentrar todas las decisiones en uno solo: la Presidencia.
Las reglas de la Revocación de Mandato aprobada por la mayoría oficialista en el periodo de AMLO, establecen que la legitimidad de ese proceso debe alcanzar al menos el 30% de la Lista Nominal vigente. En la elección de ayer ese porcentaje debería alcanzar los 30 millones de votos.
LA DE AYER, ELECCIÓN FINAL DE LA REFORMA JUDICIAL
A la Calderón, “haiga-sido-como-haiga-sido”, el golpe final e ayer de AMLO, Sheinbaum y su 4T retrocede a México al régimen absolutista de Porfirio Diaz en 1900.
Habrá hoy todavía quien dude de esto porque aún no se siente el Estado Totalitario, pero no pasará mucho para vivirlo a plenitud.
En los hechos la Democracia imperfecta, pero con grandes logros que habíamos logrado construir desde las elecciones de 1988 y gracias a las actuaciones de 3 grandes personajes- Cuauhtémoc Cárdenas, Heberto Castillo y Manuel Clouthier– no existe más. La tarea ahora será reconstruirlo.
Ello porque AMLO destruyó todo lo alcanzado en estos 35 años anteriores: acabó ya con el ascenso al poder por la vía del voto libre y efectivo al anular al INE y al Tribunal Electoral, y con una división de poderes relativamente efectiva, con separación y sus contrapesos en el Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
En estas semanas que vienen sus mayorías legislativas espurias, fraudulentas, adulteradas en Senado y Cámara de Diputados, logradas a la mala y a contrapelo del voto ciudadano del 2024, sacarán adelante su Reforma de Telecomunicaciones con la que avanzarán en el control y sometimiento de las Redes Sociales y las plataformas digitales, para eliminar así la libertad de expresión el último contrapeso social su concentración única de poderes.
Entramos ya así de lleno al proceso vivido en otros países en que la inconformidad ciudadana y la oposición buscarán nuevos canales de expresión y en no pocos casos irá al éxodo y al destierro.
Entenderemos hasta entonces que no logramos durante el sexenio de AMLO aprender de las experiencias vividas por sectores intelectuales, empresariales, académicos, gremiales y ciudadanos en Venezuela, Nicaragua y Cuba, por más que muchísimos lo advertimos.
Muchas fueron las voces, los llamados a ver lo que se venía encima con el ascenso al poder de Andrés Manuel López Obrador. Aquello de “Es Un Peligro para México” se vio como una exageración en la contienda electoral.
Hoy la destrucción a su paso es inocultable.
Sin embargo, no todo está perdido. Las movilizaciones ciudadanas de ayer y la abrumadora inocultable abstención, junto con el masivo repudio expresado en redes sociales son una muestra de que en las venas nacionales corre el rechazo verdaderamente popular a este régimen y sus intenciones.
Hoy como Galileo Galilei (quien se supone respondió a sus verdugos religiosos “eppur si muove” -sin embargo se mueve- para insistir en que todo indicaba que la tierra se mueve alrededor del sol), vemos que en México la 4T-AMLO y Sheinbaum no lo tienen todo en México.
Es obvio, evidente que el nuevo poder judicial surgido de la paupérrima votación de ayer no tiene la legitimidad para sustituir a la que se va.
Los liderazgos a lo largo de la historia surgen en el momento preciso en que deban cambiar las cosas. Esperemos que no tarde mucho el surgimiento del nuestro.
Y AMLO FINALMENTE REAPARECIÓ
Rodeado de toda clase de especulaciones, ayer reapareció en una casilla de Palenque cercana a su hacienda “La Chingada” el expresidente Andrés Manuel López Obrador.
Solo, sonriente, un tanto enfadado, delgado pero bien peinado, sin esposa o hijos a su lado, sin amigos ni excolaboradores cercanos, con el apoyo de un acordeón hecho quizá con letra propia, el exmandatario llenó y depositó sus boletas para luego dar una breve declaración en la que informó que escribe un libro sobre cultura, reiteró que Claudia Sheinbaum es la mejor presidenta que existe en el mundo y que él goza de cabal salud.
Así como reapareció desapareció de nuevo. Para continuar alimentando hipótesis sobre su vida y futuro.
LISTOS LOS SENADORES PARA REGRESAR A WASHINGTON
Recargados de fuerzas e ideas de negociación, los integrantes del grupo plural de senadores mexicanos que estuvo en Washington hace dos semanas para cabildear con senadores de allá en contra de la iniciativa del presidente Donald Trump que busca imponer un arancel del 3.5% a remesas de mexicanos, tienen ya maletas listas para salir de nuevo a la capital de EU a insistir en su misión.
Como lo anunció de propia voz el líder de las mayorías senatoriales de Morena, el tabasqueño Adán Augusto López, la idea e intención es que el mismo grupo -que ya tiene el pulso de los legisladores norteamericanos-busque ahora hablar con miembros de la Cámara de Representantes.
Es en esta cámara donde se tramitará en estos días esa iniciativa.
El grupo lo integran los senadores Ignacio Mier, Andrea Chávez, Alejandro Murat y Karina Ruiz, de Morena; Mauricio Vila Dosal, del PAN; Cristina Ruíz, del PRI; Ruth Miriam González, del PVEM; Geovanna Bañuelos, del PT; y Amalia García, de MC.
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