Tener una vivienda no basta cuando se es un adulto mayor o se tiene un integrante de la familia en esa edad, ya que se requiere de adaptaciones que ayuden a hacer más fácil y segura la vida de las personas mayores. En Inmuebles24 te compartimos algunos consejos.
“La calidad de vida es una de las necesidades que buscamos cubrir en nuestro día a día. Así que cuando se trata de adultos mayores en nuestra familia, es importante que el espacio donde habitan les ofrezca el bienestar que merecen de acuerdo con sus necesidades físicas”, comenta Karla González Montoya, Marketing Manager B2C de Inmuebles24.
El estudio “Reformas en materia de derechos de las personas mayores” realizado por el Senado de la República señala que en 2024 los adultos mayores de 60 años serán el 12.9% de la población mexicana, y que ésta aumentará al 25% en 2050.
5 adaptaciones básicas
De acuerdo con Mariana Garrido Olvera, consultora de bienestar y cuidados de adultos mayores, algunos de los elementos a considerar en una vivienda para este sector de la población son:
Buena iluminación: no es lo mismo la luz que necesitan para leer que la luz que necesitan para ver la televisión.
Buenas vías de acceso: rampas, pasillos amplios, puertas amplias para que en caso de una caída se puedan realizar los movimientos necesarios para movilizar a la persona.
Adaptación de baños: es importante que se cuente con barras de apoyo, pisos antiderrapantes y mobiliario ergonómico.
Buen sistema de comunicación para casos de emergencia (por ejemplo, tener un teléfono a la mano)
“Hay que adaptar los cuidados a la situación del adulto mayor. Es ideal acudir con un consultor que te ayude a evitar riesgos para tu familiar. Siempre se pueden invertir de una forma inteligente los recursos económicos para lograr tener espacios amigables y humanos para nuestros adultos mayores”, asegura Garrido Olvera.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam), “las viviendas amigables con personas adultas mayores construyen una sociedad más inclusiva con las necesidades de todas las generaciones” y ayudan a un envejecimiento saludable.
Las opciones para dar solución a cómo vivir lo mejor posible durante la vejez han abierto el camino a nuevas tendencias como el “cohousing”, un concepto nacido en los años 70 en Suecia, Dinamarca y Holanda que promueve un estilo de vida colaborativo donde cada quien tenga su privacidad en su propia casa, pero pueda realizar actividades comunitarias en espacios comunes.
El concepto ha sido retomado en países como España, Estados Unidos, Argentina y México.