Una de las secuelas que ni la mismísima cúpula de Morena y la presidenta Claudia
Sheinbaum se esperaban de la cacería que han emprendido en contra del dirigente del
PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, es que los ánimos se les desbordan, pero hacia el
interior de dicho instituto político y provocan crisis. De por sí los múltiples problemas que
día a día le brotan a esta errada y llamada cuarta transformación, ahora en su segundo
piso, se allegan de más conflictos como si los necesitaran.
De puro coraje, la jefa del Ejecutivo se subió al ring frente al también senador priísta y en
la muestra más reciente está que en su gustadísima “mañanera del pueblo”, lo llamó
“vende patrias”; además cuestionó la trayectoria del exgobernador de Campeche, pero ya
lo dice un conocido y popular refrán: “a quien escupe para arriba, le puede caer en la
cara” y en el caso de la inquilina de Palacio Nacional, llama poderosamente la atención
que va perdiendo autoridad moral para señalar a sus adversarios gracias ni más ni menos
que al todavía coordinador de la bancada del partido guinda en el Senado de la República,
Adán Augusto López Hernández, a quien la presidenta cubre cada vez que puede cortina
tras cortina de humo para que ya no lo cuestionen porque está más que vapuleado. Esto,
sin olvidar el caso de Andy López.
Además, no puede decir la presidenta que Alito Moreno es un “vende patrias” cuando el
campechano viajó a Estados Unidos para hacer denuncias en contra de Andrés Manuel
López Obrador y demás distinguidos militantes del partido Morena, porque la cúpula
guinda, incluidos miembros de su gabinete como el flamante secretario de Educación
Pública, Mario Martín Delgado, de plano no se atrevieron a viajar al vecino país del norte
y esto es algo muy simple: existe un fundado temor, -por no decir miedo-, a que les quiten
sus respectivas visas.
APOYO DE COPPPAL A ALITO
Los corajes, los siguen haciendo en Palacio Nacional, más aún porque la Conferencia
Permanente de Partidos Políticos de América Latina, (COPPPAL), le dio su abierto apoyo al
también dirigente del PRI. El presidente de dicha Conferencia, el presidente de Bolivia,
Jaime Paz Zamora, reconoció la voz crítica de Moreno Cárdenas en defensa de la
democracia y se solidarizó con el campechano por la persecución de la que es objeto por
parte del Estado Mexicano.
Asimismo, el líder de la COPPPAL, lamentó el avance de los populismos autoritarios tanto
en Bolivia como en México, que se caracterizan por la concentración del poder; el
desmantelamiento de contrapesos; la erosión de la independencia del Poder Judicial y los
órganos electorales; la proscripción de una oposición combativa “y la persecución de sus
líderes como ahora sucede con Alito”, sentenció el mandatario boliviano.
Mejor descrito no pudo estar lo que esta errada y llamada cuarta transformación, ahora
en un segundo piso que empieza a resquebrajarse, no pudo haber hecho Paz Zamora
porque es indudable que el partido Morena va por todo y a la hora de la hora, no le piensa
dejar absolutamente nada a sus rémoras, así que ¡aguas!, con el PVEM y el PT. ¡Qué tal!
MUNICIONES
*** Sobre la reforma electoral, el diputado morenista Alfonso Ramírez Cuéllar recchazó
que su partido quiera apoderarse de las elecciones y en alusión a la participación de la
oposición en los foros que propuso la presidenta Sheinbaum, planteó que debe abrirse un
gran debate donde todos tienen algo que aportar… “vamos a construir una gran
propuesta, dijo el legislador guinda en alusión a lo que ya se perfila una controvertida
reforma electoral. Muy incluyente resultó el vicecoordinador de la bancada de Morena en
la Cámara de Diputados, lo que sin duda contrasta porque por otro lado, la presidenta
Sheinbaum ya empezó a “respirar por la herida” y en su gustadísima “mañanera del
pueblo” de ayer, con algo más que un dejo de desprecio, preguntó el nombre de quien
ella considera es el responsable de lo que llamó el fraude electoral del 2006, que permitió
que Felipe Calderón llegara a la presidencia de la República y luego respondió que nada
más faltaba que en lugar de Pablo Gómez, en la Comisión para la Reforma Electoral,
hubiera nombrado a Luis Carlos Ugalde, hoy director de Integralia Consultores, “o a un
panista o a un priísta”, remató. Desde ese grado de soberbia, la jefa del Ejecutivo también
despreciará la carta que exconsejeros del INE, antes IFE, le hicieron llegar en la que en
resumidas cuentas le plantean: “Que tengamos un desenlace distinto y una reforma
electoral inclusiva incluyente que refuerce lo que se ha debilitado y que evite que el INE y
el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, dejen de ser ambas, instituciones
que garantizan la integridad del voto.
