Ikari, en japonés, significa enojo o ira; también es el nombre del personaje homónimo que encabeza el imaginario de La Ira de Tetsuo y hace homenaje a Omar Gutiérrez (creador de Omar y los invisibles y miembro fundador de La Ira de Tetsuo que ya no se encuentra en este plano) como Ikari Omi. Al estar tan relacionado con el mundo del manga japonés y el sentir de la CDMX la influencia de pasajes de anime de los años 90, el sonido crudo de la periferia y su centro le dio vida a «Ikari».
La ira de Tetsuo como ente creativo se transforma continuamente, transitando como nave nodriza, de espacio en espacio; comenzando los primeros tracks en el Estado de México, escribiendo las primeras líneas en el centro de la ciudad y finalmente grabada entre un departamento en Nativitas, la facultad de música de la UNAM (batería izquierda) y el estudio de Antidoping (bateria derecha), grabada a manera de cadaver exquisito, termina su primera mezcla a cargo de Monoaural a mano de Jaime Lozada y finalmente lista a mano de Raúl González Durán en Forja del Aire.
