Y se dejó golpear.
¡Déjalos, sí saben lo que hacen!, habría dicho a Chucho Ramírez en la harto conocida estrategia de victimizarse.
–¡Señor!, ¡por todos los santos!, ¡lo están madreando!, le dicen narco presidente.
–¡Déjalos, Jesús! Déjalos, yo se mi cuento –habría respondido el licenciado presidente.
No es volada ni ficción, es la sencilla conjetura que se teje a partir del momento en que se abren al escrutinio popular los actores del escándalo del momento.
Sí, más en esta temporada en la que tiene un alto valor el voto sentimental, es decir, el que se da más que por convicción ciudadana democrática, en aras de elegir al mejor o la mejor candidata, se deposita en la urna por simpatía y hasta conmiseración hacia el desvalido, al cuasi héroe patriota.
El licenciado ha dicho que es el presidente más atacado en la historia de México y se asume, incluso, por arriba de Francisco I Madero. A quienes le escuchan, a huevito, en la mañanera, sentaditos y sin chistar, les receta clases de historia, a su manera como maestro de grupo. Mal maestro, por cierto ¿a poco no?
¡Recáspita, doctora Gutiérrez!
Sí, el escándalo que atrae la atención y, para su ego, es figura internacional mas no por méritos en beneficio de 130 millones de mexicanos. ¡Nooo! Lo es en este momento y cierra la semana en el top ten de los presidentes más madreados y acusados de presuntos nexos con el narco.
las conjeturas le favorecen, buenas o malas cuentan.
¡No hay pruebas! ¡Quiero pruebas!, urge en ese discurso que ideó al amanecer del último miércoles de enero.
Pero, bueno, el licenciado López Obrador, experto que es, propietario y autor de la industria de la protesta, sabe qué pega, qué se vuelve popular. Y se dejó llevar.
¡Pégame, pero no me dejes! Y se le fue a la yugular –los clásicos dixit—al colega Tim Burton, autor de esa ola periodística convertida en escándalo que preocupa a todo el mundo, menos al Duce que duerme en Palacio Nacional y se niega a defenderse por la vía legal, como le aconseja Xóchitl Gálvez.
Lea usted.
Carlos Loret de Mola, en su espacio de Latinus televisión, la noche del miércoles entrevistó a Tim Golden, autor de esa joya periodística y le recordó que el licenciado Andrés Manuel López Obrador ha dicho que son calumnias y que no hay pruebas.
“Bueno –respondió Tim– suele ser la reacción que él tiene a información negativa en general, pero en el caso nuestro no respondió de ninguna forma a la sustancia del artículo del reportaje que hicimos.
“Nosotros –continuó–, más de una semana antes de publicación enviamos una serie de preguntas y elementos del reportaje de lo que venía, al portavoz presidencial para que nos dieran la respuesta que querían a los elementos sustanciales del reportaje y no dieron ninguna respuesta, cero, en absoluto, entonces no hay un diálogo sobre la sustancia, hay simplemente lo que nos llaman como nos quieren llamar”.
Golden comentó haber estado “trabajando varios meses en ello (el reportaje) buscando fuentes, buscando documentos”.
O sea, primo hermano, se trata de un trabajo profesional, pero le falta una parte importante y que tú sabes su valor en estos tiempos a los que llamas tiempo de zopilotes. Sí, falta tú opinión, tú versión. Pero, por esa estrategia que bien sabes operar como coyote de las cañadas de Baja California.
–¿Sabía usted de esto? Y si, tal como lo afirma este periodista, su campaña por la Presidencia de la República en el 2006 estuvo financiada por el narcotráfico–, le requirió una reportera en Palacio Nacional.
—No –mintió el licenciado presidente–, es completamente falso, es una calumnia. Están, desde luego, muy molestos y lamentablemente la prensa, como hemos visto, no sólo en México, en el mundo, está muy subordinada al poder.
En el caso de Estados Unidos –continuó– tiene mucha influencia el Departamento de Estado y las agencias en el manejo de los medios y aquí también, pero no hay ninguna prueba. Son unos viles calumniadores, aunque los premien como buenos periodistas–. Esa fue la reacción el miércoles.
Sí, sí, ¡caray!, los periodistas, canijos periodistas.
—¿Nota diplomática, presidente? —preguntaron al Duce.
—Para qué vamos al formalismo, sería como presentar un recurso de apelación en el Poder Judicial de México—respondió y, por supuesto, no podría ser de otra forma. Ya lo victimizaron y con ello le dieron pauta a gritar sin rubor:
Y Xóchitl Gálvez lo emplaza:
“Limpie el nombre de México (…) es doloroso que se diga que nuestro país tiene un narco presidente”, le dijo ayer desde Nueva York
Sí, Xóchitl Gálvez Ruiz, la candidata opositora ninguneada por el oficialismo que impulsa a Claudia Sheinbaum en la liza por la Presidencia de la República, alzó la voz en territorio de Tim Golden, laureado periodista estadunidense que el martes pasado publicó un reportaje en ProPublica en el que testigos declararon a la DEA que capos de la droga en México fondearon 2 millones de dólares a la campaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador.
Y Xóchitl Gálvez lo hizo 72 horas después de publicado el reportaje, en el que no se involucra personalmente a López Obrador, pero indirectamente lo alude presunto beneficiario de aquellos fondos, según declaraciones de testigos protegidos.
Sí, 72 horas en las que el presidente sólo ha descalificado e insultado al periodista autor de la publicación, llamándose víctima de una campaña en tiempos electorales, aunque él no es candidato a cargo alguno de elección popular.
Por ello, Xóchitl Gálvez Ruiz le solicitó presente ante tribunales de Estados Unidos una demanda por difamación, para dejar en claro si es falso que durante su campaña presidencial de 2006 recibió dinero del narcotráfico.
Pero…
Xóchilt le recordó ayer que, el reportaje publicado en la prensa internacional no solo es una afrenta para el mandatario, “también es una ofensa para 130 millones de mexicanas y mexicanos”. Por eso, enfatizó, si el periodista Tim Golden y la agencia de noticias independiente de los Estados Unidos, ProPublica lo han calumniado, es necesario que denuncie porque es doloroso que en el mundo se diga que México tiene un narcopresidente.
¡Recontra, Marcelo!
Sí, corren las horas de este escándalo que salpica a Palacio Nacional, a México y a un presidente que no ve más allá de la calumnia y no se atreve a acudir a los tribunales de Estados Unidos en busca de que se sancione a quien presuntamente lo calumnió.
Nada, nada. Esa es la estrategia. Ya verá usted cómo crecen sus momios el próximo fin de semana. Es maestro de la propaganda, el muchacho chicho de la película gacha. ¿A poco no, Drakko? Digo.
COMO ME LO PLATICARON. Eligio Valencia López, representante en Baja California de la Secta La Luz del Mundo y cercano a Nason Joaquín García hoy preso en Estados Unidos y ligado a historias de terror, aspira a la candidatura a diputado federal por Morena tras concluir su periodo como Regidor en Tijuana.
Además, a Valencia López lo relacionan con el narcotraficante “El Tommy”, ejecutado hace poco en Tijuana, y no encuentra salida ante amenazas de grupos de la delincuencia organizada y quiere fuero y protección. Uno de tantos y tantas que buscan el cobijo legislativo. ¡Zaz!
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