Las montañas son un ecosistema que se erige como uno de los más importantes de nuestro país y del mundo entero.
Su belleza única las hace estructuras que forman parte de los característicos paisajes que México tiene para ofrecer al mundo y parte fundamental de la vida natural nacional. De acuerdo con datos oficiales, las montañas cubren aproximadamente el 12% de la superficie del planeta.
En México, las cadenas montañosas se han formado a lo largo de millones de años debido a la colisión de placas tectónicas, dando lugar a siete sistemas montañosos que ocupan cerca del 23% del territorio nacional, según la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.
Pero más allá de su impactante presencia visual, las montañas desempeñan un papel crucial en la biodiversidad global. De hecho, 18 de los 36 puntos prioritarios para la biodiversidad mundial se encuentran en montañas, según la misma fuente.
Además, estas formaciones son fundamentales para la vida en nuestro planeta, ya que proporcionan servicios vitales como el suministro de agua. Sorprendentemente, se ha constatado que las montañas suministran agua a la mitad de la población mundial.
Dicho lo anterior, es importante mencionar que además las faldas de las montañas del país fungen como un escenario ideal para la práctica del detectoturismo.
“Los alrededores de las montañas y las primeras pendientes previo a las zonas de mayor relieve, son terrenos que por su naturaleza rocosa suelen esconder demasiados objetos metálicos que pueden ser hallados con el uso de un detector de metales. Aquellos detectoturistas entusiastas y grupos de personas que practican esta actividad, pueden optar por las montañas como un escenario muy atractivo a la vista en el que además de realizar búsquedas largas, pueden disfrutar de paisajes inigualables”, considera Otto Fernández, Gerente Comercial Minelab México.
Para aventurarse en este ecosistema, hay una serie de factores esenciales que se deben tener en cuenta antes de emprender tu expedición. Desde la perspectiva de Minelab, las siguientes son las principales recomendaciones y consejos para garantizar una experiencia segura y respetuosa con el entorno montañoso.
1. Conoce y respeta las regulaciones locales: Antes de aventurarse en las montañas con un detector de metales, los usuarios deben investigar las regulaciones locales y obtener los permisos necesarios. Algunas áreas pueden tener restricciones para la detección de metales debido a su importancia ecológica o cultural.
2. Planifica tu ruta con anticipación: Estudiar el terreno y planificar una ruta cuidadosamente es crucial. Las montañas pueden presentar cambios abruptos en el clima y la geografía. Es clave asegurarse de conocer los senderos adecuados e incluso ir acompañados de un guía que sea especialista en dicha montaña, además de tener en cuenta las condiciones climáticas antes de partir.
3. Empaca adecuadamente: Lleva todo el equipo necesario, incluyendo suministros de emergencia, ropa adecuada para las condiciones climáticas y una mochila ligera pero completa. También es esencial llevar suficiente agua y alimentos para la expedición.
4. Respeta la flora y fauna: Las montañas son refugios para una variedad de especies vegetales y animales. Los usuarios no solo deben respetar el entorno, sino que también evitar perturbar la vida silvestre, así como no dejar basura ni huellas a su paso.
5. Utiliza un detector de metales adecuado: Todo detectoturista debe asegurarse de que su detector de metales sea resistente y adecuado para las condiciones montañosas. Minelab ofrece una gama de detectores diseñados para funcionar en diversos entornos, incluyendo este tipo de escenarios.
El detectoturismo en las montañas puede ser una experiencia enriquecedora y emocionante, pero es esencial abordarla con responsabilidad y respeto por la naturaleza y la cultura locales. De ese modo se puede realizar una búsqueda de metales divertida y contribuir al mismo tiempo a la preservación de estos ecosistemas.