Las comisiones unidas del Congreso de la Ciudad de México dio un paso más al aprobar un dictamen que establece un límite al alquiler de propiedades a través de plataformas como Airbnb.
Esta regulación busca igualar las condiciones entre el hospedaje formal y el alojamiento temporal, creando un entorno más competitivo para todos los involucrados en el sector.
Dicho dictamen, que modifica la Ley de Turismo de la Ciudad, propone que los propietarios de departamentos y casas solo puedan alquilar sus espacios un máximo del 50% de los días del año.
Aquellos que excedan este límite perderán el derecho a renovar su registro en el padrón oficial por un año.
Esta medida, enviada al congreso local por el jefe de gobierno, Martí Batres, tiene como objetivo fundamental garantizar un turismo sostenible y controlar el número de hospedajes en la ciudad.
Durante la sesión, la diputada panista Olivia Garza presentó una reserva para aumentar el límite a un 80%, argumentando que el alquiler de espacios fomenta el comercio local, sin embargo, su propuesta fue rechazada.
Ahora, el dictamen se dirige al pleno del Congreso capitalino, donde se discutirá y votará.
En caso de ser aprobado, se espera que la regulación entre en vigor a principios del próximo año, permitiendo a los anfitriones tiempo para adaptarse a los nuevos requisitos, que incluirán el registro de propiedades y el cumplimiento de normas de seguridad y salubridad.