Las rosas son rojas… La campaña de Rado para el Día de San Valentín de 2025 gira en torno al extraordinario simbolismo de la rosa: una metáfora universal del amor.
Las imágenes, con un estilo evocador y actual, presentan dos versiones del Rado True Round Open Heart sobre un fondo onírico repleto de tonos rosas, con composiciones en primer plano elaboradas en torno a flores sujetas con delicadeza por las manos de una pareja. Los enamorados lucen en sus muñecas las versiones negra y blanca de ese color; después de todo, los polos opuestos se atraen.
La rosa (su forma, su color y su aroma), por supuesto, es un elemento imbuido de siglos de historias de amor; además, un capullo de rosa abriéndose hasta transformarse en la flor en toda su plenitud es una metáfora típica de la senda del amor verdadero. Además, podría decirse que la rosa es el equivalente floral de un reloj Rado. Su crecimiento lento y exquisito evoca el paso constante del tiempo. La delicadeza de sus pétalos y la particular estructura de cada tallo pueden entenderse como una referencia a la complejidad del movimiento de este reloj automático. Asimismo, la forma orgánica y la suavidad intrínseca de los pétalos son una analogía de la sensación que produce la cerámica de alta tecnología en contacto con la piel.
El corazón palpitante de la pasión
El propio nombre del Rado True Round Open Heart, que hace referencia a la abertura de la esfera que deja a la vista los entresijos del movimiento, indica que es el momento del amor. Podría decirse que abrir el corazón es un requisito indispensable para el amor: únicamente si uno abre el corazón, otra persona podrá corresponderle. A través de la abertura, la mirada se dirige de forma instintiva a la parte superior de la esfera y a la vibrante espiral del reloj. ¿Quizá sea una representación del corazón palpitante de la pasión?
En la campaña de Rado, el amor está sin duda en el aire a través de la delicada forma en la que la pareja acaricia la rosa, que se extiende hasta las yemas de los dedos; por último, entrelazan sus manos. En la imagen final, aparecen unidas sus muñecas, en las que ambos lucen sus relojes Rado True Round Open Heart.
Una historia de devoción
Además del simbolismo del Rado True Round Open Heart, el diseño del reloj narra una historia de devoción. Devoción por los materiales, a través de las curvas orgánicas de la caja con diseño monobloque y el brazalete, ambos elaborados en cerámica de alta tecnología: un material que no solo ofrece una durabilidad y una resistencia a los arañazos increíbles, sino que se transforma en una auténtica extensión del cuerpo. Y devoción por el exquisito funcionamiento del movimiento automático Rado calibre R734 que se puede contemplar a través de la abertura.
La espiral, por cierto, está elaborada en Nivachron™, un material antimagnético que ofrece una precisión extraordinaria. El acabado guilloche con un patrón de rayos de sol incluye detalles adicionales cautivadores; además, el reloj ofrece 80 horas de reserva de marcha, lo que mantendrá la precisión incluso cuando la persona que lo lleve puesto se quite el reloj para centrarse en otras cosas. Ambos relojes presentan agujas e índices de color oro rosa, además del icónico emblema de ancla móvil de Rado, sobre una esfera con un patrón de rayos de sol protegida por un cristal de zafiro curvado.
En conjunto, el Rado True Round Open Heart es una deslumbrante expresión moderna de los conocimientos técnicos de esta empresa relojera y canaliza el mensaje perfecto para transmitir amor y pasión. Precisamente por eso, este reloj de excepcional belleza del “Maestro de los Materiales” se convertirá en un regalo exquisito para el Día de San Valentín.
