El día llegó y a la pregunta de si la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo va a permanecer
en el continuismo parece tener respuesta ya que de entrada se puede decir que sí porque
en todos y cada uno de los eventos que encabezó, se cuidó mucho en arengar una y otra
vez que Andrés Manuel López Obrador fue el mejor presidente de México; en
corresponderle de alguna manera la pupila al maestro, al que la llevó a ocupar la
Presidencia de la República y eso no es cosa menor, por ello se comprometió a que el
humanismo mexicano, creado por el tabasqueño va a continuar, al mismo tiempo que
repitió una frase igual a como lo hizo el de Tepetitán hace seis años: “no les voy a fallar…
me comprometo a seguir haciendo historia”. ¿Será?
En todos los compromisos dados a conocer por la presidenta, dentro de los principales
puntos están: seguir con los emblemáticos y fracasados proyectos de su antecesor y el
que más mencionó fue el Tren Maya en el proyecto de ampliación de trenes para
pasajeros y de carga. No dejó de llamar la atención que a la refinería de Dos Bocas y al
Aeropuerto “Felipe Angeles”, como que no les hizo mucho caso, con todo y que señaló
que como su antecesor lo dejó establecido, y así va a seguir, la soberanía energética se
queda.
De lo que hay que destacar, es que la presidenta buscó enviar mensajes de certeza y
certidumbre a los empresarios e inversionistas y por lo menos el peso bajó frente al dólar.
El énfasis de la construcción del segundo piso de esta errada y llamada cuarta
transformación se centró básicamente en las mujeres, al anunciar que mañana enviará un
paquete de reformas para que en el artículo cuarto de la Constitución, quede clara la
igualdad sustantiva de este sector de la población.
Se implementarán mecanismos para que no haya brecha salarial entre hombres y
mujeres; gabinetes paritarios por ley; ley contra la violencia vicaria con la consigna el
agresor sale de casa; homologación de tipo penal del feminicidio; fiscalías especializadas
en feminicidios y la creación de la figura “guardianas de la Patria” para proteger a las
mujeres; a lo mejor una especie de servidores de la Nación o algo así.
También planteó la innovación tecnológica; la ecología, el medio ambiente, rubros que
nunca tomó en cuenta quien ahora está en la soledad de su departamento al sur de la
Ciudad de México y seguramente se dio cuenta de todas las referencias que hizo su pupila
de él, “tengo un buen maestro y voy a seguir recorriendo el país”, dijo.
Pero habrá que ver hasta dónde puede cumplir la nueva presidenta porque sus 100
puntos estuvieron ambiciosos; pintó una especie de AMLOlandia pero con más proyectos
como por ejemplo Farmacias del Bienestar ubicadas junto a los Bancos del Bienestar, –
¿qué pasará con la inútil Megafarmacia?-. Rescató un programa implementado en los
tiempos dorados del PRD como es el de “Médico en tu Casa”, en fin.
Quiso hacer Sheinbaum en la presentación de sus 100 primeros compromisos en el Zócalo
capitalino, después de la ceremonia en la que fue ungida por los pueblos tradicionales
indígenas y afroamericanos que la llamaron: “hermanita Claudia”, un evento un poco más
ligero, preguntando a los asistentes: “¿ya se cansaron?”. Sin embargo, el plus de su primer
día como presidenta fue anunciar que los programas sociales continuarán y habrá otros
más como apoyo económico para población de 60 a 64 años y para los jóvenes que
estudien en escuelas públicas. Eso es lo que pega, si no, que le pregunten a López
Obrador.
Tampoco dejó de llamar la atención que la jefa del Ejecutivo dejara hasta el último lo que
será, grosso modo, su política sobre seguridad; solo le dedicó cuatro de los 100 puntos.
¿Acaso porue se creyó aquello que dijo en los primeros minutos de ayer la ya flamante
secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez en el sentido de que podía afirmar que el
territorio nacional está en paz? Mal haría Sheinbaum si se lo toma en serio.
Lo que sí es que tuvo para darle a los adversarios de López Obrador, tanto en el Palacio
Legislativo de San Lázaro como en el Zócalo de la CDMX. Desde luego no podía faltar la
referencia a Felipe Calderón, que por lo visto seguirá siendo “el malo de la película”
Es una extensión, en suma, de más de lo mismo. Podría decirse que AMLOlandia reloaded
la hizo caer en un exceso de elogios a su antecesor que revela que Sheinbaum está
dispuesta a seguir en el continuismo, aunque con algunas propuestas de más.
De lo que se queda dentro de lo anecdótico, pasó básicamente en la Cámara de
Diputados. Saliéndose un poco del carril dictado por López Obrador, la nueva presidenta sí
saludó a la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña
Hernández a quien el tabasqueño ni caso le hizo, aunque en su discurso dijo que la
elección de jueces, magistrados y ministros, era fortalecer la democracia. No, pues sí.
En lo que puede considerarse su última aparición pública, a la hora de las selfies en San
Lázaro, el siempre acomodaticio senador Manuel Velasco, de plano se le aventó a los
brazos a López Obrador que hasta lo espantó y lo besó efusivamente en repetidas
ocasiones y luego, cuando se apersonó al pie de la tribuna legislativa, Sheinbaum Pardo
besó la mano del legislador verde, pues, ¿qué le debe?
Los legisladores de la oposición, guardaron la debida compostura, casi todos vestidos de
color negro; la fiesta era de Morena y sus rémoras y pésimos comentarios se llevó el
presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Gerardo Fernández Noroña,
que acudió en fachas a la ceremonia de transmisión de Poderes, guayabera y chamarra,
pues una noche antes, el plebeyo volvió a su belicosa actitud para insultar a los
legisladores del PAN. No tiene remedio este controvertido personaje.
MUNICIONES
*** El dirigente del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, fue el encargado de dar el
posicionamiento de su partido, en el marco de la toma de protesta de la nueva
presidencia y no tiene desperdicio pues representa el papel que debe jugar la oposición en
esta nueva etapa y que empezó por convocar al diálogo, a la conciliación, a pensar en el
beneficio de las familias mexicanas. En entrevista, Alito Moreno subrayó que “el PRI será
firme, claro, crítico, pero constructivo, porque lo que queremos es que le vaya bien a
México, que se resuelvan los temas de seguridad, de salud, de educación y bueno, el
Congreso siempre es el espacio importante para presentar propuesta, para dar posición y
para construir con ellos”.
*** Otra razón por las cuales Claudia Sheinbaum no dio la debida atención al tema de la
inseguridad que vive el país, es porque la administración, cerró como la más violenta de la
historia con 199 mil 621 homicidios y este dato duro, definitivamente, no es amarillismo,
así es que a ver cómo le va a este segundo piso de la errada y llamada cuarta
transformación.
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