[email protected]
Pareciera que las series televisivas, cinematográficas y en redes sociales sobre las “Señoras
del Narco! no es ficción, sino una lamentable realidad, que en América Latina se han
convertido en la extensión de los capos que obtienen billonarias ganancias de esta ilícita
actividad gracias a la permisividad que en este sexenio les ha dado Andrés Manuel López
Obrador, a través de tres frases que marcaron la traición y corrupción del Peje –a México,
la democracia, la imagen presidencial, la soberanía y a los mexicanos-
Y no es casual, sino causal (plan con maña) que desde sus periplos electoreros en 3
ocasiones para ganar la presidencia de México (dos derrotas) 2006, 2012, 2018, Andrés
Manuel se haya identificado, socializado, enamorado, afiliado, contuberniado con las
mafias, carteles, delincuencia organizada. En sus discursos (2018), el Peje no sólo justificó,
sino ponderó la presencia y actividades de estos asesinos. Sus “petardazos”, estigma del
tabasqueño, son: “abrazos, no balazos”, “Amnistía: perdón y olvido”, “cuidamos a las
bandas (delincuentes) porque también son humanos”, dejan ver que el sexenio 2018/2024
es Narco/Estado, que no sólo los nacionales sabemos… sino es del dominio público
mundial.
Y no nos dejarán mentir –porque es cierto- Andrés Manuel, Claudia Sheinbaum, Rosa
Icela Rodríguez, Luis Crescencio Sandoval, Rafael Ojeda Durán, David Córdova Campos,
Audomaro Martínez Zapata, Olga Sánchez Cordero, Adán Augusto López, Luisa María
Alcalde Luján; en su tiempo, Alfonso Durazo Montaño, que fueron y son corresponsables
(por omisión, complicidad, incapacidad, corrupción e impunidad) de las atrocidades del
crimen organizado que en el quinquenio (2019-2023) han arrojado más de 167 mil 400
homicidios dolosos y contando, a lo largo y ancho del país. De frontera a frontera, del
Golfo al Pacífico.
Y quien aprendió a ciegas, por lo que sigue a pie juntillas los pasos de su mesías, jefe,
patrón, tsen sei, ídolo, maestro (del mal), tótem, tata, Andrés Manuel López Obrador, la
“corcholata favorita”, ahora candidata impuesta a la presidencial por Morena; asesina
doloso/culposa (52 muertos: Rébsamen, Línea 12 del Metro), Claudia Sheinbaum Pardo,
quien durante su nefasta gestión de 5 años, en el GCDMX supo, protegió, “cuido”,
cogobernó con 14 carteles de la delincuencia organizada, protegidos, ilegalmente, por el
jefe de la policía de la Ciudad, Omar García Harfuch (ahora suspirante de la Sheinbaum al
gobierno del ex DF)
El mismo estilo, marranadas, estulticias que a nivel federal hace López Obrador, las realizó
#esClaudia -que guardando toda proporción por el tamaño de entidades (República vs
CDMX)- destruyó la capital del país. El dúo perverso Claudia/Omar, permitió en su (des)
gobierno más de 4 mil 600 homicidios dolosos… y contando. 3 mil personas
desaparecidas (no encontradas) y contando –ahora con Martí Batres Guadarrama- el porro
de porros, y su genízaro de la Ciudad, Pablo Vázquez Camacho. ¡Más de lo mismo!-
La trama y trampa de López Obrador y Sheinbaum Pardo, fue, que desde 2019 (inicio de
ambos gobiernos) la lagartija pestilente sería la “corcholata favorita” para el relevo en la
T4a, de ahí que, cito, aprender a ciegas, permitió a la Clau, aprovecharse del cargo para
hacer pre, pre campaña rumbo a 2024, con todo el dinero de la Ciudad de México, la
estructura burocrática, medios oficiales de la entidad; personal y Programas “cachavotos”
Sociales locales para ponderar, exaltar, resaltar, su horrible imagen, con la complicidad del
Congreso de la CDMX, con mayoría morenista, el Instituto Electoral de la CDMX; desde
luego con aportaciones multimillonarias desde Palacio Nacional y la simulación de las
“encuestas” de Morena para elegir al ungido.
Todo esto es y fue un derroche de dinero público (en sólo 70 días de tramposa campaña
interna, Sheinbaum se gastó más de 32 millones de pesos, cuando el límite fijado por el
INE fue de 5 millones de pesos por cada uno de los 4 aspirantes). Sin embargo, la
“favorita” gozó y usufructuó dinero federal y local, para comprar votos, conciencias.
Publicidad, “favores” de medios de comunicación indignos, como el periódico El
Universal, sumiso ante la lagartija pestilente, cuando desde 2019, Morena, T4a, López
Obrador, sabían que Sheinbaum Pardo sería el “dedazo”, la designación personal de
Andrés Manuel, aunque se enfadaran los tres restantes: Adán y Ricardo como borregos,
larvas, esquiroles, patiños, que jugaron el juego perverso de simular competencia. Marcelo
no toleró la trampa y enfrentó (simulado) a AMLO.
Claudia no es digna candidata. Primero porque fingió gobernar la Ciudad de México, que
sólo utilizó como trampolín para agraciar a López Obrador, pues el sueño del macuspano es
seguir destrozando al país, a través de su “relevo” (que no ganará la elección del 24).
Segundó, defraudó desde el inicio de su gestión las arcas de la ciudad, pues fue para exhibir
su imagen (comprada), placeo con Andrés Manuel, local y nacional, para que la conocieran.
Regaló dinero del presupuesto, impuestos, multas, tarifas, sanciones, a los pobres de la
entidad para adoctrinarlos, someterlos, condicionar la entrega de beneficios para asistir a
eventos, acarreo, mítines –en su favor y del Peje-, marchas, concentraciones.
Tercero, no llegó democráticamente a la candidatura presidencial, porque simularon
encuestas, recorridos, campaña, decisión de la militancia. Sabemos por qué y cómo llegó
ahí: imposición, larvismo, sumisión. No es mujer integra, independiente, autónoma, ni
toma decisiones. A lo largo de su vida política ha estado a la sombra del Peje, hace lo que
le ordena. Jamás le dice no, aunque tenga la razón. Es servil, indigna.
Dejen les digo el significado de servil que envuelve a Claudia Sheinbaum, por lo que jamás
podría ser una jefa de Estado, por su nula dignidad. Servil.- persona rastrera que se somete
totalmente a la autoridad de alguien. ¿Verdad que sí?
Y miren si no. Cuando la tragedia en 2017 en el Colegio Rébsamen, en donde murieron 26
personas entre niños, niñas, jóvenes, adultos, a causa del sismo, Sheinbaum era Jefa
Delegacional en Tlalpan (en donde se ubica la escuela). Pese a la advertencia de clausurar
una construcción ilegal que ponía en riesgo la estabilidad del inmueble escolar, Claudia,
por corrupción, complicidad y omisión, autorizó la obra. 26 víctimas.
En vez de enjuiciarla, el entonces, y aun, líder-dueño de Morena, aspirante a la candidatura
presidencial en 2018, Andrés Manuel, protegió, escondió, blindó a su “corcholata” y lejos
de promover un juicio por homicidio culposo/doloso, la postuló aspirante a la jefatura de
gobierno de la CDMX.
Ya en el cargo, la fatídica noche del 3 de mayo de 2021, un tramo elevado de la Línea 12
del Metro colapsó. Dos vagones del convoy cayeron al vacío formando un “V” muriendo in
situ, 26 personas que regresaban a casa luego de su jornada diaria. La consecuencia de la
tragedia: falta de mantenimiento de la Línea por recorte al presupuesto (ordenado por
López Obrador), bajo la peregrina austeridad republicana. Responsables directos del
desastre, Andrés Manuel, Marcelo Ebrard, Mario Delgado, Claudia Sheinbaum, Florencia
Serranía, Miguel Ángel Mancera.
Claudia es autora directa de la muerte de 26 pasajeros (por dolo, omisión, servilismo) ya
que no tuvo el valor, “tamaños” de decir no a López Obrador, por reducir el presupuesto
para mantenimiento y operación del STC (Metro).
Lejos de asumir su error y enfrentar juicio penal ¿qué creen? ¡Atinó! Su mecías la premió
con la candidatura a la presidencia de la república para el próximo año.
Por eso digo, es aspirante indigna. Desde luego –y es muy notorio- carece de perfil
profesional para el cargo. Una persona que vive a expensas de un loco, del enemigo público
número 1 de México (por eso su amistad con Donald Trump), no tiene derecho a asumir la
presidencia del país No tiene capacidad, experiencia, virtudes profesionales, ética, moral,
conocimientos, carisma, personalidad, atractivo (sólo miren su figura), voz, empatía.
Claudia es tranza, roba y robó los dineros públicos de la Ciudad para seguir en campaña,
lleva 5 años haciéndolo (2019 a 2023 y contando). Cuando necesita más recursos le pide a
Andrés Manuel que de inmediato hurta los fondos federales para patrocinar a su
“corcholata”.
Es tal el afán corrupto de Morena y T4a, por cuidar la espalda de Andrés Manuel, ahora que
en septiembre de 2024 se vaya a La Chingada (en sus dos acepciones, su rancho y el deseo
ferviente de los mexicanos) que, “sea como sea”, “hagan lo que tengan que hacer”, “no
escatimen nada para conservar el poder” –les dijo el Peje a sus larvas- que utilizarán todo el
poder del Estado, artimañas, marranadas, a La Bota Militar, al narco, la delincuencia
organizada (ya lo aplicaron en la elección intermedia de 2021, a nivel local y nacional),
para que el siguiente sexenio (2024-2030) que ganará la oposición, no perdone las
corruptelas, pendejadas, tranzas, fraudes, robos, destrucción del país, para detenerlo,
enjuiciarlo, y encerrarlo de por vida, por traición a la patria, a los mexicanos, por su
complicidad y complacencia con los carteles y la delincuencia organiza.
En su haber Andrés Manuel, Claudia, Rosa Icela, Luis Crescencio, Ojeda Durán,
Audomaro Martínez, Córdova Campos, Alfonso Durazo, entre otros cientos de la
Transformación de 4ª, son asesinos dolosos. Han enlutado más de 206 mil hogares por
crímenes de odio, permitidos y “cuidados” de la mano de la mafia.
Ahora, pretenden en la horrible figura física e incapacidad intelectual de #esClaudia dar
continuismo a un sistema (que frustraremos los mexicanos de bien) de dictadura que no
pudo –aunque intento- imponer el Loco de Palacio.
*Colaborador en los Grupos Editoriales Digitales entresemana.mx, metropolihoy.com,
pasaporteinformativo.mx, gustavorenteria.com, portalhidalgo.com,
grupometropoli.net